La
historia de la costa ecuatoriana, cuya primera cultura, Valdivia, es, a no
dudarlo, la primera de las culturas humanas indígenas en la América Latina.
La identidad es una manera de ser, de sentir e interpretar al mundo. Es un legado que recibimos. Es una construcción social, algo vivo y por tanto, cambiante. La identidad manabita es una construcción horizontal en la que participan todos los actores sociales, por tanto es mucho más sólida porque no es impuesta desde arriba y se ha fortalecido por la ausencia de diferencias sociales. Es fluida, creativa y cambiante manifestándose de muy diversas maneras como en la comida, los mitos y relatos campesinos, versos populares o amor fino, en la hospitalidad e incluso en la casa campesina que es muy estética, rodeada de jardines donde destacan el color y el perfume de las flores.
La identidad es una manera de ser, de sentir e interpretar al mundo. Es un legado que recibimos. Es una construcción social, algo vivo y por tanto, cambiante. La identidad manabita es una construcción horizontal en la que participan todos los actores sociales, por tanto es mucho más sólida porque no es impuesta desde arriba y se ha fortalecido por la ausencia de diferencias sociales. Es fluida, creativa y cambiante manifestándose de muy diversas maneras como en la comida, los mitos y relatos campesinos, versos populares o amor fino, en la hospitalidad e incluso en la casa campesina que es muy estética, rodeada de jardines donde destacan el color y el perfume de las flores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario