miércoles, 29 de enero de 2014

Bodas de Sangre-desnudo.

La bella lleva el pelo en caracolillos sobre la frente, la ropa en una envoltura de objetos, miniaturas y colores, y ha hecho su hamaca de pájaros rayados y flores violeta. La bella lleva los hombros desnudos, los brazos y el torso blanco como la noche, tomados de luz de luna, y los ojos grandes, excesivos, ojos nocturnos que iluminan una nariz breve y una boca roja. La bella es Sonia de Klamery, de Anglada Camarasa.

Durante toda la historia de la humanidad el ser humano, y en especial los artistas de todas las épocas, se han interesado en plasmar la belleza en el desnudo femenino, todo un símbolo. 

Una mujer entra a un cuarto y a media luz, se desnuda en silencio, mientras la observan, comentan y critican, cada parte del cuerpo desnudo, mientras ella guarda silencio (pintura, escultura o fotografía).
¿Cuál es ese misterio que posee la fémina y que el hombre no logra contener ni retener en su neurona y que necesite inmortalizar la belleza del cuerpo desnudo?
En este tiempo en que los valores morales brillan por su ausencia; alabo a las mujeres que saben su valor y son respetadas y amadas. 
Una de las situaciones más comunes es la de ser consciente de que habrá infinidad de palabras, conceptos, imágenes o símbolos que probablemente no sean comprendidos por el mestizaje de culturas aunque sean habituales y conocidos en nuestro modo de entender las cosas. Especialmente esto es importante en el terreno del arte y concretamente en el de los textos literarios, la escultura, la pintura y la fotografía.

La obra Bodas de sangre de Federico García Lorca. La lectura va más o menos fluida, explicando algunas cuestiones que pienso son necesarias para comprenderla. 
¿Hasta qué punto entienden la situación planteada? 
Parece que la base del conflicto sí la entienden. Saben que la novia está enamorada de Leonardo y que la boda con el novio la sume en la desolación y la amargura.

Hay un momento en que el novio y su madre regala unas medias caladas a la novia. Es un elemento que lleva aneja la sensualidad, y más cuando la criada describe dichas medias asociadas a las piernas (la pantorrilla, los muslos...). 
Antes en España las mujeres velaban totalmente su cuerpo. No podía ser contemplado por un hombre que, sin embargo, si veía un fragmento de pantorrilla, era para él altamente excitante. ¿Entienden el conflicto que se plantea en esta obra literaria? Las jóvenes marroquíes también velan su cuerpo (no todas) y tienen un sentido del pudor que lo aproxima a esas concepciones de principios de siglo. 
¿Hasta qué punto les desconciertan las alusiones a la cama, a los dos cuerpos, el del novio y la novia, encontrándose el día de la boda? 
Desconozco dónde están los referentes claros porque una pintura, una escultura y hasta una fotografía de torso descubierto crea la alarma de pensamientos destructivos, mal intencionado, suposiciones viciosas de mentes perturbadas en unos casos y en otros es la expresividad de las pupilas del hombre en ver plasmada la belleza de la fémina.
Una de estas visiones de enternder la obra literaria esta centrada en la corona de azahar que arroja la novia al suelo el día de la boda. 
¿Sabéis lo que es el azahar?
Es la flor de naranjo, es blanca y simboliza la virginidad. 
Los asuntos referidos al pudor son susceptibles de choques culturales. En la película El resplandor de Kubrick aparece un desnudo de una mujer misteriosa en la habitación 237 y observo que niñas marroquíes y latinoamericanas apartan la vista de la pantalla. Están educadas en otros parámetros en que el desnudo o el sexo son tabúes como lo eran para nosotros hace un par de generaciones en la España de los años cincuenta o sesenta en que comenzamos a abrirnos en este terreno. De hecho los años anteriores a la Transición y la Transición misma suponen una eclosión de lo sexual que revela la fuerte tensión acumulada por la represión del franquismo.

Sin duda ha de haber una fuerte tensión en este terreno entre los varones y las chicas que estén formados en una visión puritana del sexo de acuerdo a su cultura. Sin embargo, no son inmunes a las influencias de la sociedad occidental cuya libertad en el sentido del pudor es mucho más amplia. Entiendo que hay un fuerte conflicto sexual en el que chocan la identidad cultural (musulmana) y la realidad fisiológica personal, a la vez en un contexto cultural que no ayuda demasiado a las ideas de mantenimiento de la castidad hasta el matrimonio. Pienso que el hiyabque que portan las muchachas es precisamente ese símbolo que expresa la virginidad y que representaba el azahar en la obra Bodas de sangre.

Supongo que la clave en este sentido es la de abordar las cuestiones con normalidad, pero ello no deja de plantearme interrogantes sobre los límites o las explicaciones necesarias.  Porque la tolerancia en pensamiento en los que había situaciones o imágenes que no admiten su religión, debe ser respetado.



Muchos pensamientos de otras culturas como la latinoamericana y marroquí forma parte de la cultura más cercana como es la idea de virginidad que tiene que ser medular como lo era de la nuestra no hace tanto tiempo. 













domingo, 26 de enero de 2014

La vida es muy sencilla.


Si me sedujera de igual modo tu ingenio, al expresarte, que al calor que desprenden tus ojos...si me enternecieran de igual forma, tus palabras y ese don, de transmitir lo que anhelas, que tu risa franca...si me perturbaran, los mensajes que me dedicas, tanto o más que el brillo de tu mirada, si me enamorara, de tu esencia única y total, con la misma intensidad, que de tu rostro...
...no sería preciso acudir a esas fiestas, a las que a veces vamos aunque no nos apetece, porque estamos solos; cambiaría los garitos nocturnos, por la luz de la mañana, las copas a deshoras por una cena para dos, regada con un buen vino y tantas otras cosas...emprendería una tierna aventura contigo, para descansar, de vez en cuando, a la sombra de cualquier árbol, si es verano...al calor de no importa qué fuego, si es invierno, y allá donde mire, poder verte.

Si la puerta que da acceso a la magia, aparece entreabierta y nos invita. Porque la vida es muy sencilla y vivirla sencillamente es una gran labor del ser humano.