La disfunción eréctil: erecciones breves
La disfunción eréctil (o DE) puede ser una incapacidad total para
lograr una erección, una capacidad inconsistente para hacerlo, o una tendencia
a tener solamente erecciones breves. Estas variaciones hacen difícil definir la
DE y calcular su incidencia.
Los cálculos varían desde 20 hasta 30 millones de casos, según la
definición usada. De acuerdo con la encuesta de Atención Médica Ambulatoria
Nacional (NAMCS,
siglas en inglés), por cada 1.000 hombres en EE.UU., se hicieron 7,7 visitas al
consultorio médico por DE en 1985. En 1999,
la frecuencia casi se había triplicado a 22,3. El aumento se produjo de modo
gradual, presuntamente a medida que se pusieron a disposición más ampliamente
tratamientos tales como los dispositivos de vacío y los medicamentos
inyectables y comenzó a aceptarse la discusión de la disfunción eréctil. Es
posible que el avance más publicitado fuera la introducción del medicamento
oral citrato de
sildenafil (Viagra) en marzo de 1998.
Los datos de NAMCS sobre medicamentos nuevos muestran un cálculo de 2.6
millones de menciones de Viagra en visitas al consultorio médico en 1999,
y un tercio de esas menciones tuvieron lugar durante visitas para un
diagnóstico no relacionado con DE.
En los hombres mayores, la DE generalmente tiene una causa física,
como una enfermedad, una lesión o efectos secundarios de medicamentos.
Cualquier trastorno que cause una lesión en los nervios o que deteriore el
flujo de sangre al pene puede causar DE. La incidencia aumenta con la edad:
alrededor del 5 por ciento de los hombres de 40 años de edad y entre el 15 y el
25 por ciento de los hombres de 65 años de edad experimentan DE. Pero la
disfunción eréctil no es necesariamente una parte inevitable del proceso de
envejecimiento.
Debido a que una erección requiere una secuencia precisa de eventos,
la DE puede presentarse cuando cualquiera de tales eventos se interrumpe. La secuencia
completa incluye los impulsos de los nervios en el cerebro, en la columna
vertebral y en el área alrededor del pene, así como las respuestas de los músculos, los tejidos
fibrosos, las venas y las arterias en y cerca de los cuerpos cavernosos
del pene.
La causa más común de DE es el daño a los nervios, a las arterias, a
los músculos lisos y a los tejidos fibrosos, a menudo como resultado de una
enfermedad. Enfermedades tales como la diabetes, afecciones del riñón, alcoholismo
crónico3
, esclerosis múltiple,
arteriosclerosis, psoriasis, enfermedad
vascular y enfermedad neurológica son responsables de alrededor del
70 por ciento de los casos de DE. Entre el 35 y el 50 por ciento de los varones
con diabetes padecen DE.
También una cirugía (especialmente
la cirugía radical de próstata debido a
cáncer) puede lesionar nervios y arterias cerca del pene, y causar DE. Una
lesión en el pene, en la columna vertebral, en la próstata, en la vejiga y en la pelvis puede llevar a DE, y producir lesión en los
nervios, en los músculos lisos, en las arterias y en los tejidos fibrosos de
los cuerpos cavernosos.
Además, muchos medicamentos comunes -medicamentos para la presión arterial,
antihistamínicos,
antidepresivos, tranquilizantes, supresores del apetito y cimetidina (un medicamento para la úlcera)-
pueden causar DE como efecto secundario.
Los expertos piensan que factores psicológicos, tales como el estrés, la ansiedad, la culpa, la depresión, una baja autoestima y el miedo a
no desempeñarse en el coito como se espera causan del 10 al 20 por ciento de
los casos de DE. Los hombres con una causa física de DE a menudo experimentan
el mismo tipo de reacciones psicológicas (estrés, ansiedad, culpa, depresión).
Otras causas posibles son el tabaquismo, que afecta el flujo sanguíneo en las venas y en las
arterias, y anormalidades en las hormonas, como por
ejemplo una cantidad insuficiente de testosterona. El incremento de prolactina que pueden producir algunos
fármacos como los ansiolíticos y antipsicóticos (risperidona, olanzapina, haloperidol) puede provocar también
disfunción eréctil. Las causas hormonales suelen afectar asimismo la libido.
En resumen:
En resumen:
Pueden aparecer combinadas:
- Orgánicas: son las de origen anatómico, genitourinario, urológico
(lesiones congénitas del pene), endocrino (diabetes), infeccioso,
neurológico (lesiones cerebrales, lesiones medulares), vascular
(arteriosclerosis) o farmacológicas (por el consumo de sustancias
adictivas: alcoholismo, tabaquismo, algunos medicamentos, sustancias
adictivas ilegales) (constituyen el 15 por ciento de los casos).4
- Traumáticas: una fractura de la pelvis, por ejemplo.4
- Psicológicas: debido a factores afectivos, de desarrollo, interpersonales,
de conocimientos, ansiedad, miedo
al fracaso, sentimientos de culpa, infidelidad, eyaculación
precoz previa, inseguridad
emocional, etc.4
La DE se puede presentar por alteración de uno o varios de los tres
mecanismos responsables de la erección: bloqueo de las arterias; incapacidad de
los vasos sanguíneos dentro del pene para almacenar la sangre, o daño en los
nervios del pene o del área pelviana. También pueden ser responsables de una DE
otras disfunciones fisiológicas, como bajos niveles de hormona masculina
(testosterona).
Las situaciones que más frecuentemente producen DE son: enfermedades
que afectan a los vasos sanguíneos y restringen el flujo sanguíneo hacia el
pene, como la diabetes, la hipertensión (tensión arterial alta), el exceso de
colesterol o las enfermedades cardíacas. Situaciones que interrumpen la
conexión entre el sistema nervioso y el pene, como la cirugía de próstata o
lesiones traumáticas en la zona. Muchos medicamentos (algunos de ellos
empleados para tratar la hipertensión y las depresiones) causan DE entre los
efectos secundarios no deseados. Depresión nerviosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario