El objetivo es la atención psicológica a hombres y mujeres con problemas de control y violencia en el ámbito familiar.
¿Qué pueden hacer los psicólogos para tratar a los maltratadores?
- Nuestro objetivo es la desaparición de las conductas de maltrato (físico, psicológico, destrucción de la propiedad y sexual), independientemente de que la pareja siga conviviendo o se haya separado.
¿Qué pueden hacer los psicólogos para tratar a los maltratadores?
- Nuestro objetivo es la desaparición de las conductas de maltrato (físico, psicológico, destrucción de la propiedad y sexual), independientemente de que la pareja siga conviviendo o se haya separado.
Se utilizan técnicas de suspensión temporal, estrategias para el afrontamiento de la ira y control de impulsos, abordaje del consumo abusivo o excesivo de alcohol, manejo de la ansiedad, entrenamiento en solución de problemas y comunicación en la pareja, abordaje del problema de los celos y psicoeducación en igualdad.
¿Es un maltratador un enfermo mental?
- Los "maltratadores" son aquellos hombres que ejercen alguna de las formas de abuso (físico, psicológico, económico, sexual...) con su esposa o compañera, vulnerando su libertad y ocasionándole algún tipo de daño físico, psicológico, social, o económico... No obstante, es preferible utilizar términos más descriptivos, que no hagan referencia al "ser" sino a la "conducta". Así hablamos de hombres que ejercen violencia familiar, violencia de género o violencia machista. En ocasiones, la violencia aparece asociada a ciertos síndromes psiquiátricos. Pero, en líneas generales, podemos afirmar sin dudas que el hombre que ejerce maltrato no es un enfermo mental.
-¿Psicológicamente, tiene cura?
-La cura es un concepto eminentemente médico. No se trata de enfermos mentales, sino de conductas, creencias y actitudes que causan daño en otra persona. El abordaje exclusivamente judicial y policial de la violencia en el hogar resulta claramente insuficiente. Está comprobado que en los casos en que las mujeres se divorcian de sus compañeros violentos, al poco tiempo éstos vuelven a constituir una nueva pareja y la violencia sólo se desplaza de una mujer a otra.
Los resultados son moderadamente optimistas.
-La rehabilitación, ¿es completa? ¿O el maltratador, como el alcohólico, debe ser consciente de su condición de por vida?
Se les alienta a que permanezcan alerta ante eventuales factores de riesgo. Como en tantos órdenes de la vida, hablamos de autocontrol.
-La rehabilitación, ¿es completa? ¿O el maltratador, como el alcohólico, debe ser consciente de su condición de por vida?
Se les alienta a que permanezcan alerta ante eventuales factores de riesgo. Como en tantos órdenes de la vida, hablamos de autocontrol.
¿Cuál es el perfil tipo de un maltratador?
-Es probable que una proporción significativa de casos no responda a un tipo único o puro. Probablemente una de las más conocidas es la ofrecida por Dutton que da tres perfiles:
-Es probable que una proporción significativa de casos no responda a un tipo único o puro. Probablemente una de las más conocidas es la ofrecida por Dutton que da tres perfiles:
El tipo "básico" es el más frecuente en los programas de tratamiento. Responde a un hombre con episodios de violencia esporádicos, que justifica su conducta, pero tiene remordimientos tras el episodio. Tiene dificultad para identificar y comunicar sentimientos, siendo frecuentes las conductas de celos.
El tipo "psicopático" el que peor pronóstico tiene. Suele tener antecedentes penales y de violencia en otros contextos. No suele presentar sentimientos de culpa.
-¿Existen casos difícilmente detectables?
El tercer tipo, el "hipercontrolador", que es un individuo que puede pasar inadvertido incluso para profesionales familiarizados con el problema de la violencia familiar. Su objetivo es obtener sumisión y obediencia de su mujer. Es minucioso, perfeccionista y dominante. Presenta unas ideas rígidas acerca de la división de roles, la educación de los hijos, etc.
-¿Existen casos difícilmente detectables?
El tercer tipo, el "hipercontrolador", que es un individuo que puede pasar inadvertido incluso para profesionales familiarizados con el problema de la violencia familiar. Su objetivo es obtener sumisión y obediencia de su mujer. Es minucioso, perfeccionista y dominante. Presenta unas ideas rígidas acerca de la división de roles, la educación de los hijos, etc.